Revelación

"Lo que pasa contigo Siday, es que eres una farsa"

Así me lo dijo bien claro mi inconsciente anoche, en un sueño, a través de la imagen representativa de alguien a quien admiro mucho.

Y si, aunque lamentable, tengo que admitirlo. A falta de saber quién soy, creé un Yo que no me termina de convencer, especialmente cuando veo que le agrada a la mayoría de la gente que me rodea. Tal vez tengo muy arraigado eso de que por ser humanos tendemos a ser despreciables como tal, y esperamos a que la gente nos desprecie por eso. O puede ser que simplemente estoy rodeada de hipócritas, tan hipócritas como yo.

"Históricamente, los vacíos tienden a llenarse con algo –casi siempre con algo peligroso–" acabo de leer en una columna del Malpensante, y aunque no tenga nada que ver aquel tema con este, quisiera agregarle "...con algo peligroso e irreal".

Siday NO Existe.


Escucha cuando estés solo:
Soda Stereo - Signos (1986)

Se dice A-no-ni-mo...

[Léase el título con el mismo estilo de Homero cuando dice "a-tó-mi-co" en este vídeo ]

No puedo dormir, hace rato no tenía insomnio...


Cuando uno empieza a ser reconocido, va perdiendo libertad. ¡Dios mio, no permitas que pierda mi querido anonimato!

La gente que se afana en ser famosa, los 'wannabe', los que se llenan la boca diciendo "es que usted no sabe quién soy yo (?)" [cuando ni uno mismo sabe responderse esa pregunta], esos no tienen ni idea de a lo que están renunciando. El anonimato, lejos de ser una cobardía, le concede al hombre ser quien Es sin la etiqueta de los prejuicios ajenos. Permite 'no moldearse', permite ser multiforme, permite avanzar en el descubrimiento del YO sin tantas alteraciones externas. Y sin embargo, aún después de saber eso, todos insistimos en trascender de alguna forma, y ganarnos nuestro lugar en el mundo, ya sea de la forma más sencilla (un hijo) o esforzándose lo suficiente para sobresalir en algo, porque lamentablemente en nuestra sociedad, el simple hecho de ser Persona no implica tener el respeto y el trato especial de la gente que nos rodea sin apreciarnos. 

O todo esto puede ser mero cuento mío, excusas erradas que me inventé en la reivindicación por mi derecho a la 'conformidad' que tanto se me ha negado y criticado (por mí y por los otros)... No me hagan caso, estoy desvariando...


Aleatorio

Yo quiero seguir pensando en que todas las personas que conozco son buenas, gentiles, sinceras y sensatas, y que no hacen las cosas para perjudicar, sino para ayudar a los demás. Eso es lo que quiero pensar hasta que ellas mismas me demuestran lo contrario con sus actos y me destruyen la fantasía... cosa que no me sorprende, tampoco me irrita. Se me hace tan normal la desilusión, que lo que en verdad me fascina es cuando esta no se presenta.

Y sin embargo, no creo que tengamos el corazón de piedra, no creo en los resentidos/apáticos sociales. Más bien es que son tantas atrocidades al mismo tiempo que uno no alcanza a digerirlas todas; no acabas de digerir alguna mala noticia cuando se presenta otra peor, y todo es confuso pues tampoco sabes cuales hechos son verdad y cuales no, no sabemos en quien confiar, y los noticieros no ayudan en nada...  además, en mi caso, en realidad no se que hacer o contra quien luchar para parar tanta barbarie no solo en Colombia, sino en el mundo... salir a las calles a protestar, o tirar piedra, incluso denunciar, todo me parece inútil, tal vez en otros países si funcionen esas actividades, pero aquí no he visto que eso pase, pues no estamos unidos ni queremos estarlo... cosa que aveces me entristece.

Pensándolo bien... no entiendo al mundo ni a su gente. No se lo que es el amor, tampoco el sexo, ni se bien lo que es vivir... no entiendo el concepto de muchas cosas que hago constantemente, no tengo idea de los motivos intrínsecos de la naturaleza, de mi naturaleza, si es que los hay. A mis ojos soy una ignorante en todo su esplendor, una ignorante más, así como usted que me lee, y que no puede responder el mar de cuestiones que me llenan la mente tarde tras tarde. 

Desde pequeña me he esforzado tanto por comprender, aceptar y asimilar mi entorno, para no alterarlos en un afán de búsqueda de "libertad" [para mi, eso de 'libertad individual' o 'libertad económica' es una completa mierda, la libertad es absoluta o no es nada]. No entiendo a la gente y su tabú ante las cosas más sencillas existentes. La capacidad de conexión está alterada, asimismo la de asociación. No entiendo como una mujer interpreta un sencillo "me gustas" como "quiero casarme contigo", o como un hombre interpreta un "debemos darnos un tiempo" como "me interesa alguien más". Supongo que la comunicación es la parte más jodida de ser Humano, y pasamos casi toda nuestra vida intentando hacernos entender.

Hasta que uno tira la toalla y deja de preocuparse por los demás, y si el mensaje que se quiso dar llegó al remitente con la misma connotación con la que se envío. Uno empieza a amar el silencio, a dejar de debatir, a guardar todas esas ideas y reflexiones bajo la almohada, o en un simple blog que realmente a nadie le importa y no trascenderá. Uno empieza a sentirse solo y ausente, aprende a pasar desapercibido, y a valorar la música y la compañía de pocos, hasta que un día te encuentras desubicado, sentado por dos horas en silencio en el sofá de tu casa sin nada que hacer*.


(. . .)


Y doy vueltas siempre en el mismo punto. Monótono.